28 April, 2010
RAGE RIDERS
Esta semana les hablare acerca de una terrible experiencia personal, la cual me hizo reflexionar acerca de los peligros y responsabilidades que conllevan tener un auto.
Apenas a inicio de semana me toco por casualidades de la vida ser el copiloto de una persona que forma parte de un selecto grupo de “conductores” que ha crecido mucho en los últimos años y que pone en peligro a los viandantes, a los demás conductores, así como a ellos mismos, estoy hablando de aquellas personas que carecen de autocontrol al volante, que siempre quieren pasar primero y ser los más rápidos en las calles y que he decidido bautizar como RAGE RIDERS.
Vaya que son un peligro, generalmente son los que inician los problemas viales, ya sea al pasarse un semáforo en rojo, realizar cambios bruscos de carril o más comúnmente por los numerosos choques que provocan en su afán velocista, que los impulsa a realizar actos tan estúpidos como acelerar diabólicamente en una esquina solo para frenar abruptamente al llegar a la siguiente esquina, creyéndose poseedores de gran habilidad al mando de su auto y aparte sentirse admirados por todos, sin notar que tales miradas son de incomprensión y disgusto por parte de los incautos transeúntes y compañeros automovilistas.
Desafortunadamente todos conocemos a alguien que cuadra a la perfección con esta descripción, ya que entre estos personajes no importa la edad o genero, vaya ni siquiera el tipo de automóvil que conduce, pudiéndose encontrar RAGE RIDERS a lo largo de todo el espectro de segmentos contenidos dentro del universo automotor, desde autos subcompactos, pasando por las famosísimas SUV‘S, hasta llegar a los verdaderos autos deportivos.
Yo creo que el principal motivo que genera la existencia de estas personas es la falta de educación vial, para obtener la licencia de conducir no hace falta más que pagar la cuota correspondiente y en algunos casos (los menos) presentar un examen escrito que pruebe nuestro conocimiento de las reglas y normas a las que todo conductor está ligado, esto claro sin el examen práctico que es requerido en otros países y que es esencial para reconocer la responsabilidad y los conocimientos con los que debe contar cualquier persona que desee hacer uso de un automóvil.
Así que ya lo sabes conduce responsablemente y ten en cuenta que no eres el único que circula por las calles, no querrás que la gente piense que eres una de esas personas sin educación, que piensa que el tener un automóvil no está sujeto a seguir el reglamento de tránsito, un clásico RAGE RIDER.